Prisionero de guerra...(privado)

"Es libre de creer lo que más guste, si desea tenerme desconfianza puede hacerlo, no me importa en realidad, no esta en mis medios cambiar los hecho para ganar hombres, eso solo arruina la confianza que le puedo tener a ellos."

Declaraba con sincera, seguro cualquier pasaría su manos al fuego por el y sus palabras, pero bueno era cosa de cuidado realmente creerle o no porque a final de cuenta era un ser engañoso para sus beneficios, no le importaba que medios debía de usar para lograr lo que quería, aunque tampoco era tan egoísta a veces si lo hacía por el bien de su gente pero era difícil diferenciar cuales eran esos momentos.

"Sólo le digo los hecho como lo que son y si quiere saber porque actué se lo diré, el que desee confiar de esas palabras o no dependerá de que tanto ha sido manipulada su mentalidad."

Dijo con una sonrisa a descruzar sus piernas y dejar de jugar con sus cabellos, retomando una actitud sería.

"Los de Heaven a empezado su movimiento para iniciar una guerra, hace poco día logramos salvar a un pequeño grupo de niños demonios que fueron cazados por soldados de su estimado gobernando Cromwell.", Se vio un gesto de molestia en su rostro. “Ellos se encontraba felices en su centro de cuidado hasta que unos de sus cuidadores le pidió salir según para un paseo y cuando ya estaba afuera en la tierra de nadie.”

Hizo una pausa como demostrando el dolor que perjudicaba en esa acción, las tierras de nadie era esos lugares donde colindaba los reinos.

“...Fueron atacados, los que eran mas grande ayudaron a escapar a los pequeños, pero era claro que no podían dar nada de ventaja eran sólo niños que apenas aprende a invocar a sus familiares.”

Se vio cerrar su mano en un puño haciendo que sus uña rasgara la piel.

“Y aun así parecía no importarle por suerte algunos de mis soldados estaba en las frontera haciendo su ronda, pero... En realidad fue más que suerte porque estaban por irse cuando vieron a un familiar ser heridos por los ángeles, aun cuando se apresuraron a ellos sólo pudieron salvar tres pequeños, dos de ellos no sobre pasan ni diez años demoníaco.”

Enfrento su mirada para saber su reacción.

“¿Realmente cree que si fueron capaz de eso no haría lo mismo con alguien como usted?, Aunque tal vez si lo hacen estaría totalmente dispuesto a abandonar su vida en mano de su ‘gobernante’ y no duraría en lastimar a su familiar que se encuentra llorando por verlo de esa forma.”

Escuchó atentamente lo que le decía el príncipe, dudando si era cierto o no lo que le estaba contando de Cromwell, si Cromwell era el aúténtico autor de aquel ataque o había sido intencionado por alguien que quería provocar una guerra. Le negó silencioso tan solo ladeando su rostro de un lado a otro como deseando negarse aquello y sin embargo creyendo parte de lo mismo con una facilidad pasmosa, tal que inclusó se sorprendía a si mismo de aquello. Miró así las cadenas en sus manos, escuchando su ensordecedor sonido cuando las agitó ligeramente y luego volvió a dirigir su mirada turquesa al príncipe.

-No te negaré que Cromwel no admite demasiado a los demonios, que no los ve capaces de adaptarse a las normas de Heaven o de poder cambiar sus instintos, pero a mi me considera una ecepción...y aún así...-bajó ligeramente su mirada recordando aquel desprecio cuando beso su cuello...¿que podía esperar realmente del príncipe?. Sólo sabía que si tenía suerte de volver a verlo, le robaría un beso por última vez, incluso si a este le daba asco su esencia oscura. Se lo robaría por que realmente lo amaba. Comprendía lo que le había dicho Rakiel, que prefería asesinar a la persona amada antes verlo en brazos ajenos, aunque no esperaba de sí mismo desearle algo así a Cromwel, pero una parte del rugía por privatizarlo, que fuera solo suyo. Se veía extraño en un fértil...realmente desconocía como sería capaz de actuar cuando estuviera frente al otro, pero con el amor que sentía y que ahora había aceptado, no apuntaba a nada bueno.

-Mi familiar y yo sufrimos por otra cosa, estoy enamorado del príncipe pero realmente quiero luchar por mantener mi puesto de Heaven...aunque me has complicado mucho las cosas....-comentó más tranquilo tomando uno de aquellos bocaditos. Desde luego no podían quejarse del cocinero.-Mi familiar es más paciente que yo a pesar de tener siete cabezas...-siguió hablando algo metido en sus pensamientos, parecía dudar de que Cromwell fuera capaz de algo así y al mismo tiempo no le decía que no al príncipe.

- ¿Por eso me has secuestrado o soy una travesura para tí?...te seré franco...seré capaz de creer en tus palabras sobre el daño causado por Cromwell ,si tú eres capaz de darme un motivo convincente por el que me hayas secuestrado...por que lo único que puedo pensar de todo esto, es que quieres ganarme por algún motivo. Dime, si te creo...que pasaría luego,¿me liberarías o que harías?

"Y aun así... ¿Te repudia?"

Completo aquella frase como si nada caminando hacía la ventana pasando a ver algunas aves surca por el cielo, no era esas palomas blancas que podía cruzar aquel reino blanco de donde venía aquel demonio, pero era aves de diversos colores que buscaba un lugar calido para su descanso.

"Aunque te de un buen motivo lo durarías y eso realmente no me molesta."

Se giro hacía el dejando su espalda contra aquella ventana, su mirada rojiza se mostraba como el mental en la lumbre viva, como si fuera lava caliente que arrasaba con todo.

"Si quieres prueba de lo que hizo tu lindo gobernante puedes leer mi mente o mejor aun porque no lees la de los pequeños, así veras en tu propia mente como fueron asesinados sus compañero, como pudieron ver los ojos vacíos de sus hermano y sintieron el filo de la muerte por poco atravesarlos."

Cerró por unos segundos su mirada haciendo que se volviera calmada cuando se abrió de nuevo.

"Puedo dejarte libre ahora mismo pero se que haría la estupidez de volver a Heaven para ser asesinado y no tengo los ánimos de permitir eso al menos no hasta que se acabe cierto juicio.”

Lo observó silencioso, contemplando al igual que él aquellas aves en la ventana que justo se veían tras Kitsune, buscando su lugar de algún modo. Algo que ahora mismo Mirtros sentía que le faltaba, no tanto por sus padres sino por el la ausencia del príncipe en sí. Su mirada se ensombreció, ocultándose tras el flequillo, tampoco esperaba que Cromwell lo repudiara, quería pensar en otra posibilidad que ni el mismo entendía, pero que tan solo se quedaba en esas, en una idea confusa, en una esperanza difusa.

-Cromwel no es malvado...solo intenta defender a los suyos, no creo que sea capaz de llegar a ese extremo...-murmuró por lo bajo.- No es como Sebel...

Negó de pronto algo testarudo y alzó su mirada hacia Kitsune, frunciendo ligeramente el ceño y con las mejillas sonrosadas. Parecía que algo le había tocado la fibra en las palabras del demonio.

-Date cuenta que él podría pensar lo mismo de tí...de hecho, no hace mucho hubo un ataque en el palacio de Heaven...-murmuró sin más, esperando alguna respuesta, alguna señal por parte del menor que tambien exculpara a su reino.- Puede mostrarme las imágenes que quieras, pero si Cromwel no aparece en ellas y nno veo alguno de mis soldados, estaré en mi derecho de seguir dudando de ello.

Se rió a escuchar aquellas palabras que decía el demonio y ni siquiera ocultaba la gracia que le causaba, sólo era sincero con aquella reacción porque realmente le parecía algo entretenido.

"¿En serio llama defender el acto de asesinar a otros?, eso realmente es patético. Cierto él no es como Sebel porque ante los ojos de mucho sólo es un suplente temporal hasta el regreso del gobernante, pero diría que tienes mucho que estudiar si realmente quiere hablar del antiguo gobernante del reino de los cielos porque de otra forma estarás en peligro, si me interesara más mi tío ahora estaría ya muerto."

No tenia ninguna admiración o algún sentimiento cercano hacía su "tío" pero aun así de cierta forma era de su agrado, de una forma demasiado peculiar, pero admitiéndolo de forma sincera estaba mejor dormido que despierto de esa forma podía continuar su plan sin ningún estorbo más.

"¿Palacio?, mm, cierto algo escuche de eso, pero hasta donde tengo entendido, usaron los cuatro elementos a la vez, eso sólo quiere decir que fue un terrano."

Sonrió ante aquella conclusión tan sencilla.

"Diría que deben de estudiar más sobre los elementos naturales o de otra forma estarán en desventaja si ni siquiera pueden concluir eso el reino de Heaven esta en problemas, nosotros los demonios sólo podemos usar dos elementos y eso si realmente eres fuerte, la mayoría de los nuestro sólo usa uno, pero tienen la ventaja de tener a su familiar si lo sabes controlar bien es una gran herramientas. Si desea engatusarme para que me culpe de algo no esta yendo por buen camino y adelante puede dudar, si lo sigue haciendo después de ver aquella evidencia estará en todo su derecho pero antes de eso no puede hacerlo."

Entendió nada mas oírlo que eran asuntos políticos y el príncipe Kitsune no parecía interesado en creer que no fuera Cromwell, pero Mirtros lo defendía a pesar de todo. Sabía que tenía pruebas para demostrar que no podía ser Cromwell.

-No es eso y lo siento...tampoco quería parecer grosero...-murmuró suave bajando la mirada y observando los platillos de verdura que aún seguían allí. Sentía que tampoco encajaba en aquel lugar, en Heaven se desenvolbía mejor en muchas cosas, era extraño ser parte de ese mundo de ángeles y ahora echarlo de menos, especialmente a su gobernante. El amor cegaba a Mirtros en muchas cosas y a pesar del desprecio del otro, quería volver por que una parte del sentía que todo había quedado pendiente entre ellos. No podía desear dejar de amarlo y como que todo volviera a la normalidad como estaba antes, pero tampoco afirmar que podía amarlo y pretender que todo está bien. No era su fuerte sufrir en silencio, pero esa situación era demasiado delicada.

-Un ángel encapuchado atacó a uno de los nuestros no hace mucho...hum...lo sé por que usó una barrera de protección...-se silenció un momento, se acababa de escuchar a sí mismo y decidió continuar antes de que alguna risita por parte del albino lo pusiera nervioso.-Tuve que protegerlo otro ser de su propia raza, es como si alguien quisiera acelerar el despetar de Remil. Ángeles y demonios se han unido para ese fin, incluso terranos y a esos traidores no parece importarles herir a los de su propia raza con tal de salirse con la suya.

Se levantó trar terminarse su último bocado, sintiendo que recuperaba sus fuerzas. Sabía que era una acusación muy grave y su gobernante debía estar preocupado, lo último que debía entrar en su mente era Mirtros y una parte se lamentaba en silencio por ello. Lo echaba demasiado de menos, demasiado.

-Me estoy alejando un poco del tema de mi secuestro pero...no le deseo mal a otros, si realmente los demonios no han tenido que ver con el ataque al palacio de Heaven...deben ser los siguientes, por que según tengo entendido, aquí tambien yacen reliquias de los antepasados y ellos pretenden reunir las que les interesan...después de todo lo que ha escuchado...¿que opina su alteza al respecto?.-lo observó curioso, había cambiado el tema pero deseaba charlar con el albino. Ezequiel le había hablado de su encuentro y el perfil de Kitsune le resultó curioso, su hermano le había hablado bien de ese diablillo.

Oía lo que remarcaba aquel demonio y discutir sobre aquel punto no sería interesante, lo dejaría seguir pensando que era inocente su gobernante a final de cuenta había otras forma de manipular a las personas, aunque no deseaba hacer de todo eso, sólo quería, bueno eso era algo que seguiría guardado aun bajo sus memorias y esperaba el momentos justo de brotar.

"Es cierto en cada reino hay una parte de la reliquia."

Confirmo aquella información.

"Aunque eso en realidad es un hecho que no me interesa si desean las reliquias pueden venir y tomarlas, pero claro que eso significaría conocer a mi padre."

Volvió su vista hacia la ventana pero esta vez enfocando un punto en el horizonte haya donde descansaba esas reliquias que le era importante a su padre.

"Lo único que realmente no permitiría es que se metieran con aquellos que custodio y eso me recuerda a cierto ángel que fue atacado el cual aparecer es parte de mi 'querido' tío Remil eso es lo único que no me tiene feliz ahora porque acusan a un demonio muy de mi estima, pero retomando a su problema, no esta secuestrado puedo dejarlo en libertar en cualquier segundo, pero eso significaría enfrentarse contra el castillo y no muchos han salido con vida debido al temperamento de este así que prefiero que siga con esas cadenas hasta que tenga el permiso de recorrer sus pasillos."

-...-lo observó por el rabillo del ojo al escuchar con que ímpetud hablaba de su padre, recordando al suyo propio, de seguro también lo echaría de menos. Solo que Mirtros acababa de despertar y aún en ese momento seguía asentándolo todo, su propia situación en su mente.

-¿Que no estoy secuestrado?...¿se puede saber a que juegas?...-después de lo que le había dicho su hermano y ahora aquella palabras del albino, su mente se había quedado en blanco. Frunció ligeramente el ceño, estaba claro que ese día no se iba a enterar de por que Kitsune lo había capturado, y ahora aquello. Gruñó algo colérico y se sentó de nuevo en la orilla de la cama, suspirando pesadamente.- ¿Un demonio verdad?...un tal Michael, sí, lo he visto en las mazmorras.. Pero ya hace tiempo, creo que lo van a trasladar o eso rumorean.

Observó al albino con sus ojos turquesa, escuchaba muchas cosas por allí pero él mismo se había encargado de ordenar que se mantuviera en secreto. Sabía lo del ángel incluso, pero no Ezequiel y no pensaba contárselo . Mirtros no conocía a Michael y a sus ojos era culpable, por lo tanto era una amistad demasiado peligrosa para su hermano.

"No juego a nada sólo menciono los hechos."

Menciono con una sonrisa, en realidad era eso, mostrar parte de los hechos, aunque tal vez si estuviera jugando un poco, pero eso no lo necesitaba saber el demonio mientras sólo continuaría de aquella forma tranquila, viendo las reacciones de aquel personaje.

"Cierto harán un traslado en poco días para su juicio, es un hecho que me llama mucho la atención.”

Cruzo su piernas a encontrarse sentado en el sillón que estaba casi por enfrente de la ventana.

“Me causa curiosidad el saber que tanto han manipulado la verdad los sacerdotes de Heaven para con el ángel.”

Lo observó por el rabillo del ojo, por que Mirtros por su culpa ya no asistiría a ese juicio como parte de los guardias. En todo caso, iría un capitán más fuerte y con más años de experiencia para mantener vigilado al demonio. Ya lo decían los custodios, era un demonio peligroso y cuando más edad tuviera, sus poderes debían ser erradicados con aquella esposas "especiales". Ahora podía sentir que las suyas le robaban las fuerzas, lo volbían más débil y vulnerable y sentía la carga interna de no poder invocar a su familiar que gruñía por defenderlo.

-La única finalidad de los sacerdotes es proteger a Heaven de cualquier influencia externa, eso me cosnta de todo lo que te puedo decir...pero como base, te puede servir para preguntarte hasta donde son capaces de llegar.-murmuró suave, recordando el protocolo de los ángeles y el resto de sus normas. Él vívía allí asi y creía en ellos, Kitsune lo tenía complicado para girar las creencias a su favor.

-¿Tú lo quieres salvar?...¿verdad?...solo digo que Cromwell lo habrá retenido por algún motivo, no puedo defender la inocencia de ese individuo. Y ese ángel en cuestión, no he accedido a él, entre otras cosas por que no me interesa lo que diga...un demonio es capaz de manipular la mente de otros a su conveniencia y nadie me puede asegurar que haya infundido temor en ese ángel, para que solo hable a su favor.-negó ligeramente.-Tampoco hay testigos que defiendan a Michael y todo está en su contra, los angeles no desean creer que sea inocente y al parecer no tienen a nadie más que culpar. ¿Que se puede hacer ante algo así? ¿Tú crees que es inocente? y si es así, dime por que...¿que sabes tú que yo desconozca?

Spoiler:

Lo oía atentamente hasta que se levanto caminando hacía el demonio cuando escuchó sobre aquello de que manipulaba para conveniencia, le dio una bofetada y tuvo suerte de que no hiciera crecer sus uñas o estar todo marcado por ellas.

"En primero no vuelva a comentar que un demonio manipula a conveniencia... Si usted quiere desconocer su lado demoníaco esta en su derecho pero mientras no nos conozca a todos no puede hablar tal a la ligera."

Dio un paso hacía atrás pasando a caminar con tranquilidad por aquella habitación hasta girar nuevamente hacía aquel ángel cuando se sintió ya calmado y su mirada carmesí dejo de chispar como si algo fuera a brotar de él. .

"Michael es inocente por el solo hecho de que amaba a Jonathan, Aquel demonio al que crees capaz de manipular la mente del ángel estaba apunto de hacer su compromiso con ese ángel, es por eso que Jonathan decidió venir a vivir aquí a Hell bajo mi protección, si dudas de mis palabras puedo darte acceso a mis recuerdo para que veas como el ángel en cuestión llego a volunta."

Hizo una pausa enfrentándolo con la mirad.

"Tu querido gobernante deseaba encerrar aquel ángel en su templo para que fuera purificado de ese sentimiento, lo quería arrebata de aquello que amaba, el cual es el cuidado de los niño... De aquellos niños a los cuales asesinaron."

Remarco las últimas palabras.

"Aquí el estaba feliz y cualquiera de los sirvientes puede prestarte sus recuerdos para que de fe de ello... Dime no crees que es mucha coincidencia los niños asesinado, el ataque contra de él... Eso deja mucho que decir, ¿Quien más si no los de Heaven desearía encontrar a Remil?, Es claro que son los más interesados para hacer que Sebel despierte y esta claro el interés del gobernante de Heaven por eso, nadie es indiferente al sentimiento que este profesa por el antiguo gobernante del reino."

Se sentó a lado de aquel demonio.

“Lo que veo más claro que eso es la manipulación de los sacerdote para con aquel angel, seguro en estos momentos ya le ha lavado sus pensamientos con sus ideas sobre que los demonios somos de lo peor, seguro que haran que hable en contra de aquel demonio que habla si no me cree puede ir junto conmigo al juicio, aunque claro ira con otra apariencia para no se reconocido así vera de verdad lo que esos ángeles capaz de hacer y no sólo aquello que le desean mostrar.”

Lo observó curioso, era muy curioso lo tolerante que se mostraba Kitsune a permitir que Mirtros pudiera renegar de su lado demoniaco, preguntándose interiormente si lo decía en serio. Notó esa bofetada pero no la respondió, por que no estaba de muy mal talante inclusive estando secuestrado y una parte del afirmando que si lo escuchaba un poco más, que si abría un más al gobernante de Hell todo sería más fácil de sobrellevar en el secuestro.

-He visto mucho y he oído mucho...-murmuró suave, con su mirada perdida después de haber escuchado todo lo que le decía Kitsune. Lo que menos logró tolerar y realmente le había robado algunas expresiones de su rostro había sido aquello de que Cromwell intentaba purificar a ese ángel para dejar de sentir. Eso no le podía caber en la cabeza, no hasta ese punto.

Cerró los ojos un instante notando ese peso en su corazón, que sabía, se le haría más pesado con el pasar de los días. Por una parte haberse alejado de Cromwel y de su influencia, de sus duras palabras estaba bien para su alma, por que justo en ese instante y a pesar de todo lo que había escuchado una parte del se sentía más en paz. No habían miradas que reprochar o de las cuales huír, pero no quería creer que todo podía acabar así de fácil. Que con el pasar de los días Crom teminase creyendo que finalmente había logrado que se marcharse de Heaven. No es que estuvieran unidos por lazos más fuertes que la amistad o el deber, era solo que tenía cierta fé en alguna cosas que había escuchado...le decía que lo consideraba un demonio diferente, una ecepción y sabía que eso el albino lo decía de corazón.

-¿Te crees que los ángeles son los buenos? pueden llegar a ser tan crueles como un demonio si se lo proponen...y realmente no considero que estés defendiendo una injusticia que no se haya cometido aquí. ¿Sabes a quien le estás hablando? ¿tienes si siquiera una idea de con quien estás discutiendo los errores de Heaven?...la justicia no puede salvarlos a todos.-funció el ceño y lo observó a esos ojos rojizos.- Soy el capitán de la guardia o al menos lo era, soy un soldado que se debe a su patria.

-En realidad te creo, menos en culpar a Crom de los asesinatos...pero ese ángel cree que está entre los suyos y que lo están protegiendo, no se si ha luchado realmente por ese demonio que tanto lo ama...tan solo es, que la dotrinas no manipulan tanto a los ángeles como tú te crees...-se levantó de allí y se dirigió a la ventana, dejando allí su mirada, si algo le había enseñado su hermano mayor, es que la paciencia era definitivamente la virtud del más sabio. Él no dudaría mucho allí, tan solo deseaba escapar, pero no le convenía realmente hacerlo de momento. El asunto con el gobernante era realmente delicado y su principal objetivo debía ser meditar como hacerle comprender que aunque estuviera enamorado del no debía considerarlo por ello una amenaza.

-Mencionaste algo de que aprecias a ese demonio, ¿como se puede proteger a la persona que más amas de tus propios temores?.

"Bueno o malo, eso depende de cada ser no precisamente esta regido por su raza, sólo que algunos desean juzga bajo ella y fingir lo que no son para que seres ingenuos que rayan a lo estupido lo crean."

Declaro con tranquilidad dejando una sonrisa a concluir su frase como si fuera un comentario como cualquier otro, pero era sólo su personalidad y ver que tan influenciado se encontraba aquel demonio, lo escuchó.

"Eso lo sabía perfectamente, se cada cosas de ti, al menos las más destacable, como te dije me preocupo por mi demonios así sea exiliados por traición o algún otro crimen."

Se movió con lentitud por aquella habitación.

"Si eres tan débil como para no saberlo entonces no mereces conocer aquel sentimiento, ese sentir no se basa en cuando puedas razona si no en otra cosa, pero cada uno debe de descubrirlo hasta donde es capaz de llegar para darle la felicidad de ese ser amado."

A lo dicho lo observó un instante y bastante pensativo, Kitsune le daba la pequeña sensación de que actuaba más por su cuenta de que por lo que otros le decían.

-¿También de los exiliados?...espera un momento...algo me dice que haces esto por tu cuenta...es decir, tu padre es el gobernador, no puede interesarle alguien como yo...-bajó la cabeza algo pensativo y lo contado por Ezequiel. Estaba algo confuso, no es que sintiera que lo habían salvado de algo o alguien, sino más bien alejarlo unos días a pesar de todo. No tantopor que Kitsune quisiera ayudarlo realmente, pero sin quererlo, le estaba haciendo un favor al darle unos días para despejar su mente de todo lo dicho por Crom.

-Bien, realmente si quieres una respuesta concreta de que puede sucederle a Michael, por mi parte no puedo darte algo concreto como tampoco conozco a Nathan, pero si realmente se aman de seguro Cromwell lo considerará una aberración. Cuando se sincera de verdad, es mejor que ese Cromwell que mantiene las formas y tambien mucho peor...mmm...la verdad que no te gustaría escucharlo..-cruzó las piernas echándose hacia atrás y aprovechó que una de las pomposas mascotas estaba a su lado para cogerla y amasarla para relajarse, incluso sin más se le escpaó una sonrisita. ¿Que estaba recordando?

-A veces no sabe ubicarse ni él mismo, ese tal Nathan, deberá insistir mucho si quiere salvar a su demonio...Cromwell es un hueso duro de roer. Por eso te digo, que no puedo asegurarte nada de lo que pueda suceder, pero realmente me preocupa el antojo de Cromwell por verlo culpable y dejar que el verdadero torturador siga por ahí suelto. No me esperaría del que el simple hecho de que esos dos se amen, ciegue tanto su orgullo que no sea capaz de ver la verdad. Solo si Cromwel a amado alguna vez, puede ser capaz de comprenderlos pero como dije...solo tiene fé en el amor fraternal, esa es su doctrina, incluso ve mal a dos ángeles enamorados.

Y todo eso, le daba celos dirigidos hacia ese Sebel. Ese mismo que cuando despertara, de seguro querría asesinar a Mirtros, seguido de sus padres, seguido de Ezequiel. La efímera esperanza de que no despertara nunca era lo que lo hacía conservar su propia cordura.

"Cierto, Mi padre es mi padre, el tiene su forma de hacer sus cosas, yo tengo la mía, aun cuando un hijo sea parte de su progenitor eso no significa que ceda a todas sus ideales."

Declaro con tranquilidad, no era que presentara una rebelión contra su padre, él amaba a su papá pero eso tampoco significaba que no tuviera sus propios pensamientos, sabía que deseaba y no descansaría hasta lograrlo así le demostraba que tanto había crecido.

"¿Realmente odia el amor entre dos ángeles?, Ja, yo creo que sólo deja ver eso por que no es fue correspondido en sus tiempos."

Declaro pasando a tomar entre sus manos a una de sus pequeñas.

"Pero no me preocupa saber que le pasara a Michael se que mi papá podrá encargarse de eso, lo que me preocupa aunque suene raro es el ángel, lo deseo de regreso con nosotros, aquí estará mejor al menos podrá vivir esa liberta que desea. Y aparte de todo ello ha muchas más preocupaciones, como dije, deseo que vea el juicio presentándose como alguien más y no como el subordinado de Heaven."

-¿No fue correspondido por quien?...responde ahora mismo...-como cuando cuestionaba a uno de los prisioneros con mano dura, su mirada turquesa pasó de la dureza a una expresión más dulce y de asombro, ese amor egoísta y posesivo le asustó.- Lo siento...espera, tampoco debo disculparme contigo...¿lo siento igual?...perdón..

Frunció el ceño de nuevo y se negó así mismo, sonrojándose sin más y desviando la mirada hacia la ventana. De quien se había enamorado ese ángel que el había prometido proteger a costa de su vida, al que debía servir hasta la muerte. ¿Quien se atrevía a residir en el corazón de Cromwell? eso no podía, no debía...

-¿?...-se le pasó enseguida al escuchar el siguiente comentario y su mirada volbió a reflejar a Kitsune.- Tu padre Edreid, no tiene control total sobre las desiciones de Cromwell...no digo que dudes de sus capacidades para convencer y ganar, pero no es bueno que lo des todo por hecho...-jadeó pesadamente amasando la bola peluda de color negro y sintiéndose observado por la misma, bajó la mirada y frunció el ceño, aquella bola peluda era adorable, demasiado adorable y le hacía sentirse intimidado.-Hum...asi que te encariñaste con Nathan, la verdad que no lo he tratado en persona...¿y a quien crees que estaría dispuesto a liberar Cromwel antes?...¿al demonio que acusa de intento de homicidio o al angel que retiene en contra de su voluntad?

Se rió a ver aquella posesión, nadie podía ser indiferente a esos sentimientos mucho menos ellos, la posesión de una sola persona, el deseo incontrolable sobre hacerlo mucho, entre muchas otras acciones que no pasaba mas allá del egoísmo era el mismo significado del amor, de ese que era mucho más primitivo que aquel puro que invocaban todos.

"Cierto no debes de disculparme conmigo, además sin importar cuando me intimides no te diría nada, aunque es divertido que no sepas de quien se trata, deberás de prestar más atención a tu angelito."

Se estaba divirtiendo y eso no lo ocultaba, era muy sincero con sus acciones, claro cuando no parecía que su naturaleza brotaba sin reparo en engatusar a todos, dejándolos engañados.

"Pero si no he dicho eso, además es seguro que la decisión no será del gobernante de Heaven ni de mi padre, es seguro que tendrá quien juzgar alguien mas neutral."

Comento, bueno eso era más que obvio, dudaba que alguno de los dos cediera, pero eso era lo divertido.

"Jaja, no me malinterprete, siento por el ángel lo mismo que siento por algunas de mis mascota, sólo lo quiero por el hecho de que le da felicidad a uno de mis demonios. Juzgaría que liberaría primero al demonio juzgado esta claro que no cederá con uno de sus ángeles y eso es lo que hace todo esto interesante por si mismo."

Camino hacia el dejando una distancia mucho mas corta, acaricio el rostro del otro demonio.

"Será divertido jugar para ver quien es el más justo..."

Le hizo un leve corto en los labios antes de lamer el leve hilillo carmesí que le provoco y solo concluir con un beso sobre aquellos labios.

-¿Como pretendes que le ponga atención si me tienes aquí secuestrado?-masculló con cierto enojo, era obvio que así nunca podría descubrirlo.

Negó al escucharlo, no podía entender a ese príncipe y por que a Ezequiel le había agradado de alguna manera. Para Mirtros era un demonio como todos los demás, solo pensaba en su propio beneficio pero realmente no tenía pinta de atarse demasiado a otros.

-¿Mascota?...si Michael escuchara eso no le haría ninguna gracia...-funció el ceño al notar esas caricias en su rostro, no podía entender que pretendia ahora el otro pero al estar sentado para Mirtros sería más difícil escapar. Se oyó un sonido agudo y luego las mascota de Kitsune escondiéndose tras la blanca, el demonio había vuelto a apretarla demasiado fuerte pero por movimiento reflejo.

-¿Pero que haces?¡¡...-gruño colérico, lo apartó con una mano mientras con la ajena notaba se tocaba el labio inferior, notanto con sorpresa un corte en la boca y la yema de su dedo con sangre.-¿A que estás jugando?...ni se te ocurra intentar algo conmigo por que no respondo...

Lo decía bastante en serio, Kitsune no debía fiarse por que no estaba tratando con alguien tan paciente y amable como Ezequiel precisamente. El demonio solo recordó alguien que fuera capaz de hacerle sentir algo así, Cromwell, solo Cromwell cruzaba su mente a tal grado que hasta Kitsune podría notarlo presente en sus pensamientos.

"Bueno si todos estos años a su lado no lo viste no creo que por esta fuera dos o tres días haga la diferencia."

Declaro con tranquilidad antes de mirarlo con una sonrisa.

"Él no se enojaría."

Estaba seguro de ello, bueno el demonio lo conocía tan bien como su padre, no era nada extraño que supiera su forma de afecto, y seguro que estaría agradecido de que fuera sólo ese el sentimiento para con él ángel antes de que fuera un caos.

"Sólo saboreaba su sangre no es nada extraño, y si hice o no algo ya se dará cuenta de eso, por cierto su sangre es deliciosa."

Declaro con una sonrisa, no necesitaba más que ese sabor metálico.

-Puede ser que en parte tengas razón, pero si tenemos en cuenta el tiempo que he socializado con él pueden cambiar las tornas.

Mirtros andaba un poco respondón, puede que debido a su reciente carácter pero realmente no sabía ni donde ubicarse en ese momento. Se acarició un poco más sus labios y se los lamió ligeramente esperando que la saliva natural cicatrizara el resto. Se preguntaba que clase de hechizo le había puesto el otro...hablaba de tres días, había sentido algo más que un simple beso...

-¿No?...pues vaya demonio más extraño, solo conozco a alguien con semejante paciencia...-Ezequiel, sin ir mas lejos, seguramente un carácter compatible con el de Kitsune, de seguro harían buena pareja.

-¿Pero que pretendes exactamente?...luego el juicio...quieres que asista al juicio, estás antojado de alguna forma en relacionarme con esa pareja...¿por sentir algo por Cromwell? ¿tal vez?...-el albino se reflejó en sus ojos turquesa gracias a la luz que aún entraba por la ventana.-¿Que quieres que haga por tí? o más bien por ellos?...

Sólo sonrió a esas palabras en realidad no se hacía tan raro, aunque claro tampoco era muy común, sólo era él alguien que maravillaba a todos, su presencia era tan única como la de su padre a final de cuenta él fue el encargado de su enseñanza, aunque claro también aprendió de otros demonios, seria por eso que era lo que era actualmente o sólo era ya su naturaleza.

"Eso lo sabrás en su determinado momento, te aseguro que cuando lo sepas lo entenderás todos por cierto a partir de mañana podrás salir de este lugar y podrás recorrer los pasillos del palacio daré aviso de que tengo un invitado."

Le acaricio la mejilla.

"Aunque cuidado con lo que haces porque el castillo no es nada tranquilo con las seres de paso."

Se levanto separándose de él para andar hacia la puerta.

Estaba absorto en la mirada rojiza cuando le acarició la mejilla, Mirtros parecía esta vez algo perdido en sus pensamientos en lo que le acababan de decir. Estaba claro que estaba hechizado de alguna manera, ahora podía estarlo, era demasiado extraño que después de haberle dado la oportunidad de visitar todos los parajes del castillo todo estuviera tan tranquilo.

-Fuera de este lugar...espera...-de pronto se levantó tirando de la mano del mas bajo para retenerlo un instante.-Has mencionado algo de...es decir, ¿hasta donde me permites estar fuera?...¿hay algún límite?

Spoiler:

Estaba apunto de salir junto a sus dos pequeñas cuando fue detenido, volteo a verlo escuchando sus palabras pasando a solo prestarle un poco de atención le sonrió como si sus pensamientos se adelantara a aquellos que parecía importarle realmente al demonio.

"Puedes ir al reino de los cielo si eso preguntas... Mientras no se te olvide lo que hemos hablado."