En lo más profundo...(privado)

-A veces es mejor hacerlo, se plantean situaciones que se pueden pasar por alto y que no seria nada bueno-

Tomo el mismo otro buñuelo encimismado con su pensamiento de las mil y mas posibilidades al respecto de aquella situacion tan peculiar en la que se encontraban ahora. Se expandian sin duda alguna un monton de cosas por ahi.

-Lo entiendo mejor que nadie... eso creo, una reencarnacion es solo un alma que ha vuelto a nacer, pero que cambia su caracter, su sentimiento por las vivencias... siempre he querido creer en eso...-

Y si no era si... su alma misma podria terminar destruida, por que los sentimientos de culpa y dolor sabia mejor que nadie pesarian sobre el; que un alma viviera de nuevo, con el dolor de una vida pasada... un dolor que el provocara era aplastante....

-En realidad es más complicado que eso...- le sonrió ante las posibles dudas que tenía Michael.-¿Que es lo más acertado? pues...lo que tu dices lo piensan todos en realidad. Es decir, negar tu vida anterior y tan solo limitarte a creer que el presente es lo que cuenta.

Lo observó como se comía ese buñuelo y jugueteó con la lengua de su serpiente.

-Es decir, piensas que yo acepto que soy una reencarnación de alguien pero al mismo tiempo creo dos almas, pasado y presente.-frunció el ceño.-Me temo que no es real, es un engaño. La realidad es otra, tan solo tienes un alma y aunque no te guste, cuando nacistes en la otra vida tomastes esas desiciones y tenías esos sentimientos...luego volviste a nacer y aprendistes otra nuevas. No existen dos almas Michael, esa es la realidad...y no puedes huír de tus sentimientos anteriores, tan solo sentirlos más lejanos, algunos se van pero otros permanecen...estan ahí y ahora son parte de mi presente. Mi obsesión, todo sigue ahí...no es un yo pasado...fui valiente para aceptarlo, pero cobarde para soportarme...

-No es eso a lo que me referia...-

La mirada que le dedico era algo curiosa, habia un dolor palpable en esos ojos, pena y arrepentimiento, todo aquello que estaba mezclado en su pecho, en su alma. Las lagunas que eran aquellos pozos grisaceos y azules parecian haber perdido un poco de ese brillo chispeante y vivo. Cerro los ojos pensativo, haciendo una pausa que sentia necesaria.

-El alma es la misma... comprendo eso... pero...-

Se llevo una mano a los labios, como si lo que estuviera por decir fuera lo incorrecto.

-La vida que dejan atras... es siempre una carga?... es una tonteria pensar que...al nacer nuevamente, abrir su existencia a nuevas experiencias, les haga evolucionar?, llevan las mismas cualidades, los mismos defectos, pero, no crecen?, no pueden dejar las cadenas que les atan?.-

Clavo la mirada de forma intensa en los ojos avellana, tomandole las manos, como si buscara una respuesta a todos los temores que tenia.

-Son... infelices por lo que ha pasado en su otra vida... guardan... rencores?-

-Claro que pueden dejar sus cadenas atrás y evolucionar, después de todo lo que se te suma a tu nueva vida son solo recuerdos, pero también sentimientos lejanos de la otra vida. Aunque algunos permanecen.

Comentó sonriéndole amable y hasta cálido cuando notó como tomaba sus manos, en su rostro había cierta incredulidad pero Ezequiel era tan inexpresivo a veces. Aunque aquella pregunta en sí era íntima, bajó la cabeza oscureciendo su mirada hacia Michael.

-....-sus labios se abrieorn y se cerraron sin más, como si un cándado los sellara y la inseguridad de su mirada. Se centró en la respuesta y se volbió más sereno.

-Solo te puedo asegurar que no existe reencarnación sin motivo...por eso es complicado poder comprender el "por que"...mmmh...-graciosamente apartó una de sus finas manos, a modo de pinza tomó el dedo índice de Michael y lo alejó de aquel tacto discretamente. Simplemente no estaba costumbrado a ese contacto y era variopinto ver esos gestos en un ángel.

-Guardar rencor solo depende de cada individuo...en mi caso yo soy el que debe buscar el perdón, así que desconozco el papel de Remil...yo tal vez comprenda mejor a Sebel.

Era el malo y no lo negaba, el que sacrificaba la vida de otros por amor-odio. Aquel era un paso de muchos más que debían evolucionar en Ezequiel, adentrarse en los sentimientos del alma parecía asustarlo, pero cualquiera no podía darse cuenta de ello.

-Poder comprender ambos lados seria lo ideal, pero como seres vivientes estamos condenados a solo desear ver las cosas como nosotros queremos... ese es un gran problema me parece-

Alejo el toque recordando lo que odiaba el angel el contacto y no pudo evitar sonreir levemente.

-Lo que habita en un alma, solo esa alma lo comprende cierto? y solo esa alma puede responder a las preguntas y dudas que pueda tener cualquier otro ser... Remil vera las cosas como tu? o cargara con esos sentimientos tan pesados como antiguos de esa vida donde le toco sufrir.... el destino para concluir lo que es esta maldicion, este circulo, solo recae como siempre en manos de alguien mas y los demas, somos meros espectadores.-

-No te entiendo...¿acaso te sientes limitado?...por que si es así te equivocas.-le sonrió ligeramente.- Que no hayas estado allí no quiere decir que tus pensamientos no puedan estar cerca de saberlo o intuírlo...Tal vez con un poco de suerte, la adivina de Hell pueda ayudarte en algo.

Se percató de aquella sonrisa en el otro al separar sus manos, hecho que le hizo bajar ligeramente la mirada y desear desviarla de nuevo a la ventana. No le gustaba ser evidente con ciertas pautas en su comportamiento.

Debería descansar por un buen rato y es que a pesar de estar desvelado, apenas había logrado concebir el sueño. Tan solo había logrado descansar el tiempo que permaneció en los brazos de Michael. Agradecía interiormente que alguien lo huviera protegido de aquello, de morir. De pronto frunció el ceño y acercó su mano a la ajena armado de valor, deseaba ese contacto de nuevo y darle simplemente las gracias. En un intento de tocarla que resultó nulo, en cambio se llevó el índice a los labios y sin darse cuenta se mordisqueó ligeramente la uña. Igual pronto la retiró para hablar.

-No lo sé...pero si Abel no aparece, si no lo hace pronto...tendré que buscar algo en lo que ahora tengo ...en lo que he conseguido en esta vida, algo más fuerte y que sea capaz de hacerme enfrentar las cosas...-con la mirada ausente como si ahora hablara más bien para si mismo. De pronto alzó la mirada y observó a Michael. Ahí sentado junto a él y no tardó en sentirse culpable por la simple escena que había montado, era por su culpa que el otro estaba ahí preocupado, era solo culpa suya y de nadie más. Odiaba que esa obstinación en morir arrastrase al resto. Sin embargo su rostro no decía nada, simplemente inexpresivo.-Déjame solo...necesito descansar, las pesadillas tan solo se manifiestan de noche...mejor aprovecho ahora.

-Yo... estuve...-

Desvio el rostro lentamente, levantandose caminando en direccion de la ventana, suspirando y calmando su respiracion como si sencillamente algo se hubiese realmente removido dentro suyo y buscara contenerlo.

-Son cosas que en realidad, aun participando directamente, no se puede comprender, por que el corazon es lo mas dificil de comprender.... es el que guia todo, es... el que lleva nuestras decisiones... te lo dije, somos egoistas, por eso... no terminamos de comprender.-

La temple del demonio volvi a la que mantenia, se sento nuevamente, sonriendole al angel con la misma amabilidad de antes, escuchandole.

-No me ire de aqui hasta que estes profundamente dormido... asi que adelante...-

Ladeo un poco el rostro, con la misma sonrisa afable, acomodandose en la silla.

-Te molesta que decida algo como eso por mi cuenta?-

Permaneció silencioso escuchando lo que Michael le decía, no sabía si el caso de Remil se lo estaba tomando como algo personal y había arrastrado consigo a Ezequiel, haciéndole recordar a él tambien sus desaires con el desamor y como le había hecho actuar.

Tras la distante mirada avellana y esa seriedad casi imperturbable , se mostró un ligero asombro ante el ofrecimiento de su peculiar acompañante.

-Mas que un demonio, debería calificarte de angel guardían...-murmuró sonriéndole con sutileza y mas al escuchar lo siguiente, será que Michael le agradaba demasiado.-Sinceramente no lo sé, no obstante, ya cuento con Artemisa para que vigile mi sueño...igual lo agradesco.

Se oyó un suave siseo cuando la serpiente reptó dejando espacio a su dueño como una simbiosis entre ambos. Ezequiel se acomó hundiéndose tranquilamente, dejándole una pequeña sonrisa de agradecimiento a Michael antes de inclinar el rostro hacia la ventana y cerrar los ojos. Practicamente cayó alli mismo de sueño, solo que se había desvelado por un periodo de tiempo.

-En verdad soy un demonio de lo peor...-

Se sonrio cuando lo vio dormido, le acaricio suavemente la mejilla una vez que se levanto, solo observando a la serpiente que parecia cuidar del sueño de su dueño. Se giro para salir de la habitacion y dejar al angel descansar de una vez por todas.

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