Trabajo a Media Jornada

El trabajo duro y tranquilo de aquellos cultivos le gustaba. Araba la tierra con un azadon y el sol parecia estar en todo su apogeo en aquel dia en especial.

Tras varios dias al andar vagando por el poblado, habia terminado por seguir a una mujer embarazada cuyo esposo de momento estaba en Terra atendiendo algunos negocios relacionados con los vegetales de su pequeña finca, por lo que el trabajo parecia estarse atrasando. No tardo en ofrecerse como fuerza de trabajo a cambio de un sitio para dormir por un par de dias y algo de comida.

Y ahi estaba desquitando tranquilamente su estadia y comida.

Decidió dar un paseo al cielo nuevamente, veía por todos lados tratando de no hacer desastre aunque tampoco era que no fuera a ser malo si le provocaba, pero al parecer eso no pasaría ya que algo llamo su atención fue hacía allí viendo alguien familiar, lo observo con suma curiosidad por lo que hacía pasando a simplemente estar en una pequeña distancia como analizando el terreno antes de atacar.

Se detuvo puesto que la hora le indicaba que era tiempo para la comida, se limpio el rostro bañado en sudor y tomando el azador que se hecho al hombro camino hasta aquel arbol frondoso que estaba colocado en la cerca del pequeño prado, aun lado de este estaba resguardado una pequeña toma de agua, seguramente extraia la misma de algun pozo subterraneo.

Le impresionaba el estilo de vida de los angeles, tan antiguo, casi como al principio de las cosas, era algo nostalgico sin duda alguna. se mojo el rostro y el cuello para refrescarse antes de beber el liquido vital con tranquilidad.

Se sintio reposado lo suficiente para tomar la pequeña bolsa con el almuerzo que le preparara su actual jefa dispuesto a comer bajo la sombra de ese enorme y aparentemente viejo arbol.

Se sintio observado pero intento hacer caso omiso, la presencia era la de un demonio sin duda alguna, uno poderoso.

Como si fuera un niño se acerco lenta y silenciosamente pasando a verse detrás de aquel árbol antes de asomar su cabeza que dejo caer sus cabellos largos, lo miro pasando a saber que sabia que estaba allí, se dejo caer sobre él o algo así, mejor dicho sobre su regazo como si fuera una almohada o similar, se acomodo ni preocupación de golpear algo pues sabia que sería movido, se quedo ahora recostado sobre este.

Le sigui tranquilamente mientras se deslizaba por todo lo que parecia el huerto, hasta sentirlo tras suyo en el arbol, ni siquiera se movio durante ese periodo breve se mantuvo comiendo y saboreando los alimentos que le prepararan, era realmente agradable la comida despues del trabajo. La energia se intensifico. Vaya que conocia esa aura por mas que aquel ser albino intentara esconderla. Levanto la pequeña vasija con su almuerzo cuando sintio lo que hacia aquel chico.

Suspiro un instante cuando sintio como se sentaba sobre el, y se acomodaba como si Gareth no estuviera ahi.

-Kitsune Shinda... no es asi?, no estas muy lejos de cualquier cosa que pudiera serte de curiosidad?-

Mantuvo los brazos un poco en el aire para comenzar a comer de nuevo.

"No... Estoy cerca..."

Le menciono mirándolo, viendo que era eso que comía aunque no le llamaba la atención, sólo se acomodo mejor para estar cómodo, no le importaba causar roce o algo parecido, sólo estaba entretenido en ese lugar y en aquel asiento tan cómodo, realmente se divertía molestando a los demás, bueno siempre era mas entretenido que no hacer nada.

"...Tu me causa curiosidad hoy."

Se sonrio notando la curiosa mania de ese chico y lo que decia.

-Y puedo saber por que un simple angel como yo puede causarte curiosidad?-

Le miro por unos segundos, se parecia solo un poco a esa persona, en realidad no podia comprender como es que ese chico albino era hijo de esa persona, si se parecian un poco en el caracter era decir mucho. El trinar de las aves y el sonido de los demas trabajando en los demas campos era todo lo que se escuchaba cada que caia un pequeño silencio entre ambas figuras.

-Aqui solo hay campo y siembra, algunos animales y un monton de angeles y mestizos trabajando en este tipo de labores, si no mal recuerdo tu tienes un puesto alto alla en Hell, no es asi?-

"Es por lo que no eres que me causa curiosidad."

Dijo divertido pasando a cerrar sus ojos recargándose de nuevo sobre él, aquello le aprecia entretenido y era porque sencillamente le divertía todo aquello que era raro, y aquel personaje lo era por muchas razones así que no pensaba dejarlo pasar simplemente, seguirá observándolo, además de estar cómodamente sobre él que al parecer no había intención de salir de allí.

"Si, lo tengo pero estoy aburrido allá así que decidí hacer visitas."

Le miro con tranquilidad antes de seguir con los bocados que daba, tardo un par de minutos antes de decidirse a hablar.

-Que te hace pensar que no soy lo que digo?-

No le incomodaba para nada como estaba acomodado aquel chiquillo de cabellos blancos, no pesaba nada en realidad y eso lo hacia aun mas tolerable, bostezo con pereza puesto que despues de la comida se le antojaba dormir un poco, una verdadera lastima que no fuera a hacerlo si la situacion continuaba asi.

-Creo que deberias de buscar mejores pasatiempos en tu tierra, aqui puedes meterte en problemas o meter en problemas a los demas-

"Sólo lo se."

Comento con una sonrisa cerrando sus ojos para seguir de aquella manera cómoda y era claro que no pensaba moverse ni un centímetro hasta encontrarse satisfecho, lo malo de que fuera caprichoso o de que las cosas que se le metiera a la cabeza no lo soltara así de fácil así que aquello iría para largo en esos instante por lo cual sólo lo dejaría.

"Mm eso no me importa mucho sólo deseo quitarme el aburrimiento, si quieres que me vaya tendrás que llevarme."

Suspiro solo analizando perfectamente lo que estaba pasando por esa cabecita tan peculiar, pensaba con cierto aire divertido que aquel chico era un verdadero y digno hijo de su padre.

-No me molesta si gustas quedarte ahi... de la misma manera en que no me molesta en lo absoluto el llevarte-

Continuo un poco mas devorando aquel almuerzo que parecia en verdad estar hecho de una manera mas que amorosa. Podia ver a le lejania al resto de los habitates de aquel pequeño poblado y su trabajo arduo, era medio dia despues de todo, el sol estaba en todo su esplendor y escozor y a aquellos angeles parecia realmente no importales mucho estar bajo el astro rey.

Clavo una vez mas la mirada en el albino.

-Tu nombre?-

Lo sabia, pero preferia seguir con las debidas presentaciones, despues de todo ya lo habia llamado una vez por su nombre desde un comienzo.

"Eso esta bien porque no tengo ganas de levantarme."

Sonaba todo perezosos, pero sólo estaba jugando y podía seguir con eso largo rato además mientras que estuviera cómodo no le importaba mucho además allí no pegaba el sol con tan intensidad como parecía en los campos no entendía porque le gustaba ese reino tan iluminado, era tan... Bueno simplemente no era algo que llegara a apreciar de todo porque siempre estaba la sensación de que faltaba algo.

"Kitsune Shida..."

-Me llamo Gareth Elix-

Menciono sencillamente, notando como el menor parecia seguir tranquilamente reposando. Desvio la mirada como si aquello le alejara un poco de la situacion tan peculiar en la que se encontraba ahora. Con los finos rayitos del sol que se colaban entre las ramas de aquel arbol, podia ver los reflejos platinados en el cabello ajeno, una verdadera belleza y baile de colores para la vista.

-En verdad solo estabas aqui de paseo?-

Tenia una genuina curiosidad al respecto de aquello, que un principe se alejara de su reino sin ninguna razon parecia tan extraño

"Si, ¿Acaso no puedo?"

Cuestiono con cierto aire inocente que era completamente creíble porque sus ojitos centellaron en esa ingenuidad que podía copiar tan bien, aunque claro no era algo que pudiera sostener por mucho tiempo ya que no era mucho de ser tan inocente, esperaba aquella respuesta por parte del ajeno mientras que cerraba de nuevos sus ojos en esos momentos.

"...Bueno venir por algo le quitaría el chiste..."

-Si eres un hijo digno de tu padre, no, siempre buscando algo divertido o como molestar-

Miro esos ojos, no le creia en lo mas minimo, podia sentir ese aire de travesura que parecia innato en el albino, continuo comiendo tranquilamente, observandole.

-Ya has comido algo?. Gustas algo de lo mio?-

Le tendio ahora la vasija con tranquilidad, sonriendole levemente.

"Bueno.... Es normal que tenga su habito ya que él me crio."

Le comento a final su padre había sido el encargado de su crianza una muy peculiar debía de agregar, pero eso le hizo ser un buen demonio, bueno algo así porque tenia muchos puntos que parecía su padre no tener de todo y eso le entretenía él mas cuando se la pasaba huyendo de los guardias, eso si que era pura diversión porque era divertido darse cuenta que era mas rápido.

"...Ahh"

Abrió la boca para que lo alimentara, estando ahora como un niño pequeño que sólo comería si su madre lo alimentaba.

-Entonces no tienes hambre...-

Menciono como si nada, habia tendido la vasija con los alimentos, pero al ver el gesto del albino solo se sonrio arqueando una ceja con cierta diversion, continuo comiendo como si no entendiera que queria Kitsune. Siguio mirando a los demas trabajadores de Heaven, los angeles eran peculiares en verdad, parecian no inmutarse por el sol, casi como si se alimentaran de los rayos, era demasiado contrastante con demonios como el.

“Que malvado.”

Dijo con pequeñas lagrimitas en sus ojos a ver que no lo alimentaria, viéndose triste en esos momentos y a la vez lo miraba acusadoramente, antes de inflar sus mejillas como un pequeño berrinche aunque claro esto pronto se cambio cuando beso al ajeno como algo de “entonces me alimentare de tus labios” o una idea similar.

Habia interpuesto de repente el cubierto que estaba usando para comer, justo en el momento en que los labios de aquel chico albino casi le tocan.

-Eres rapido... por lo visto hay que andarse con cuidado contigo-

Empujo el rostro ajeno con el cubierto, ahora tendiendole de nuevo un poco de comida.

-Vas o no a querer?-

Se mantuvo esta vez con la guardia en alto.

Sintió el mental eso había sido malvado pero sólo le provocar desear más eso, continuaría con aquello hasta lograr su objetivos pasando a mirarlo hizo un puchero antes de comer un poco a ver que no le daría, pero sólo era porque estaba pensando en un mejor movimiento, debía de ser algo bueno para atraparlo como se debía, pensaba con suma tranquilidad.

"...Dame un beso..."

"Tendrias que darme una buena razon para que eso pase... y no solo por que lo quieres"
Menciono tranquilamente, continuaba masticando mecanicamente, seguia preguntandose por que debia comer?, Ya su estomago parecia estar completamente satisfecho, su cuerpo inclusive parecia no exigirle demasiado de nada.

"No creo que sea bueno que andes por ahi besando desconocidos, aun si esa mania se la has copiado a tu padre"

Aquella respuesta que escuchó no le agrado demasiado, bueno no era de lo que le gustaba que se le negara algo y era por eso que era tan caprichoso, bueno no se podía ocultar su peculiar forma de ser y aquel ser no se la dejaba fácil, escuchando una razón más, entonces ese hombre conocía a su padre, bueno nada extraño en realidad debido a su tiempo de vida y el rango jerárquico que tenia.

“…Bueno podemos concluir que ya no eres un extraño así que dame un beso.”

Se sonrio con algo de complacencia, casi como si estuviera viendo a un pequeño niño pidiendo algo imposible.

-No puedo darte lo que quieres... que conosca a tu padre no quiere decir que te conosca a ti-

Le palmeo la cabeza levemente, de nuevo afirmando lo pequeño que lo veia el.

-Asi que no pidas algo imposible, de acuerdo?-

“No es nada imposible.”

Le menciono sintiendo aquellas palmadas en su cabeza, sintiendo que era tratado como niño, bueno así estaba siendo tratado en realidad como un pequeño niño, eso no era mucho de su agrado porque no era un niño de todo, sólo era joven pero no un pequeño pasando a tener que pensar en otra estrategia para conseguir lo deseado.

“Así que sólo acepta, además eso nos ayudara a conocernos mejor.”

-Creo que me gusta mas mi metodo.-

Le miro completamente entretenido, aquellos ojos era un verdadero espejo del alma y las emociones que parecia experimentar el albino. De nuevo comenzo a comer tranquilamente, escuchando lo que tenia que decir aquel demonio tan peculiar. Era demasiado curioso en realidad el comportamiento del menor y al menos le mantenia entretenido.

-Me puedes explicar como un intercambio de fluidos de esa manera puede hacer que nos conoscamos mejor?-